El teatro: una herramienta para niños con autismo

El teatro es una herramienta valiosa para ayudar a los niños autistas a aprender habilidades sociales y emocionales, y es que a través de las actividades que desempeñan en este arte, los pequeños comienzan a dar grandes pasos hacia la consolidación de nuevas aptitudes.

Sin lugar a dudas, el uso del teatro como una de las herramientas pedagógicas de los niños TEA, puede elevar su calidad de vida y facilitarles la integración en un entorno social que los saca de su zona de confort de una manera divertida, sobre todo si se aplican ciertas estrategias.

 

Estrategias teatrales efectivas para niños con autismo

Hay muchas estrategias que se aplican a nivel teatral para enseñar a los niños que están dentro del espectro autista, y, entre algunas de las más efectivas, podemos traer a colación las siguientes cinco:

  1. Juegos de rol. conllevan a la práctica de habilidades sociales, tales como la comunicación,  el trabajo en equipo y la empatía. Además, se basa en representar diferentes roles y motiva al niño a que los interprete de formas distintas.
  2. Improvisación. La improvisación les da la oportunidad de experimentar situaciones sociales que, por lo general, tienen lugar en la vida real.
  3. Narración de cuentos. Es una de las maneras más entretenidas de que eleven su paciencia, al escuchar y participar en historias. Esto contribuye con la comunicación, la empatía y la comprensión emocional.
  4. Teatro musical. Es uno de los métodos más emocionantes, en donde cantan y bailan en grupos, lo que fomenta el trabajo en equipo, la expresión emocional y la comunicación no verbal.
  5. Juegos de teatro. Hay múltiples juegos de teatro e incluso pueden ser personalizados, de acuerdo a las necesidades y destrezas de cada niño.
El teatro una herramienta para niños con autismo

Consejos para el éxito del uso del teatro en niños con autismo

Estas son algunos consejos que pueden ayudar para que un niño TEA se incorpore con éxito en las actividades teatrales:

  • Entornos estructurados. Intenta que el entorno del teatro tenga una estructura adecuada, para que el niño se sienta más cómodo y no presente episodios de ansiedad.
  • Participación activa. Constantemente motiva al pequeño a que participe en las distintas actividades y vigila que lo integren y lo hagan sentir parte del proceso.
  • Personalización del enfoque. Al igual que con todas las personas neurotípicas, los niños TEA tienen personalidades, necesidades y gustos únicos. Así que es vital que personalicen su enfoque y actividades.

También pueden disfrutar como espectadoras en obras infantiles, para que vivan el teatro de otra forma, como las que encuentras en nuestra cartelera, porque sumará beneficios para ellos.